Los profesores prefieren hijas y niñas

Los profesores prefieren hijas y niñas
¿Cuántas veces en la escuela nos hemos quejado porque, como alumnos, notamos preferencias injustas de los profesores? Este espantapájaros escolar parece ser una realidad y una investigación con resultados vergonzosos, de la Organización Internacional para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, lo confirma.
Aparentemente, los maestros prefieren a las niñas y los estudiantes de ámbitos sociales más acomodados., y esta predilección se expresa asignando calificaciones más altas.
Recordando siempre que los profesores siguen siendo seres humanos y las simpatÃas son normales en su vulnerabilidad, el hecho de que esto pueda afectar la evaluación es muy incorrecto. La investigación denuncia: "Los docentes tienden a dar mejores calificaciones en la escuela a niñas y estudiantes de entornos socioeconómicos más favorables, incluso si no obtienen mejores resultados, que a los niños y estudiantes de entornos socioeconómicos desfavorecidos"
Al ser una organización internacional, el estudio de la OCDE cubre muchos paÃses diferentes, pero Italia se destaca como uno de esos paÃses donde existe una mayor disparidad.
La OCDE entregó a un grupo de jóvenes de 15 años una hoja en la que debÃan marcar la nota que les habÃan asignado los profesores italianos. En una etapa posterior, se juzgó la preparación real de los chicos en ese asunto. Las diferencias se notaron de inmediato: favorecer a las niñas y a los hijos de los papás.
La OCDE lo etiqueta como "preocupante" esta tendencia. El género y la clase social no deberÃan ser criterios utilizados por los profesores para evaluar la preparación escolar. La OCDE destaca el verdadero propósito de las votaciones: "Promover el aprendizaje de los estudiantes, informándoles de su progreso, llamando la atención de los docentes sobre las necesidades educativas de sus estudiantes y, finalmente, certificando el nivel de competencia evaluado por docentes y escuelas"
Esperamos que alguien haga un examen de conciencia.
ArtÃculo original publicado el 19 de marzo de 2013
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